El Observatorio de la Economía Social Española de CIRIEC-España informa en su último boletín de que el Congreso de los Diputados, tras la votación de las enmiendas procedentes del trámite parlamentario en el Senado, ha aprobado el texto definitivo de Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU). La nueva Ley reconoce a la Economía Social como fórmula de emprendimiento y como sector colaborador para la actividad investigadora y la transferencia del conocimiento.
Concretamente, el artículo 2 de la Ley, sobre funciones del sistema universitario, afirma en su punto e) que son funciones de la universidad la contribución al bienestar social, al progreso económico y a la cohesión de la sociedad y del entorno territorial en que estén insertas, así como a la promoción de las lenguas oficiales de las mismas, “a través de la formación, la investigación, la transferencia e intercambio del conocimiento y la cultura del emprendimiento, tanto individual como colectiva, a partir de fórmulas societarias convencionales o de economía social”.
En el mismo artículo, punto i) hace mención al Tercer Sector, afirmando que son también funciones del sistema universitario «el fomento de la participación de la comunidad universitaria y de la ciudadanía en actividades promovidas por entidades de voluntariado y del tercer sector”.
Por su parte, en el título IV, sobre Investigación y transferencia e intercambio del conocimiento, la ley afirma (artículo 11.4), que las universidades impulsarán estructuras de investigación y de transferencia e intercambio del conocimiento e innovación que faciliten la interdisciplinariedad y multidisciplinariedad. “De igual modo, la investigación universitaria podrá desarrollarse juntamente con otros organismos o Administraciones Públicas, así como con entidades y empresas públicas, privadas y de economía social”.
Asimismo, el art. 95, sobre el régimen jurídico de las universidades privadas, reconoce que estas “tendrán personalidad jurídica propia en cualquiera de las formas legalmente existentes, pudiendo ser entidades con ánimo de lucro o de carácter social, incluidas las sociedades cooperativas”.
Preservar el pluralismo
El nuevo texto es resultado de un largo proceso de consulta y escucha con los diferentes actores del sistema universitario. Según ha afirmado el ministro de Universidades, Joan Subirats, “me enorgullece porque creo que esta Ley permite a las universidades seguir manteniendo una función esencial que llevan haciendo desde hace centenares de años. Son y seguirán siendo pilares fundamentales para preservar el pluralismo ideológico, para la generación de conocimiento crítico, para la preparación humana y profesional de los y las jóvenes, para el desarrollo de la investigación e innovación y para su transferencia a la sociedad”.
La LOSU plantea el compromiso de un gasto mínimo del 1% del PIB en universidades. “Este aumento va en la línea de lo ya acordado en la LOMLOE, de un mínimo del 5% del PIB de gasto en Educación o el 1,25% que plantea la Ley de Ciencia”, ha afirmado el ministro sobre este compromiso de financiación. La LOSU ha querido configurarse también como una herramienta que sea capaz de producir certezas y garantías al personal docente e investigador.
Aumenta la visibilidad de la economía social
El presidente de la Red ENUIES, de CIRIEC-España, Juan Juliá, ha aplaudido las menciones de la Ley a la economía social, lo que, en su opinión, “atiende al tercer gran eje del Plan de Acción Europeo para la Economía Social”, que pide aumentar la visibilidad de la economía social y que sea tenida en cuenta en los distintos niveles educativos y en los programas de emprendimiento.
La Ley supone también un espaldarazo a los agentes del sector, que desde hace tiempo vienen reclamando su lugar en los consejos sociales de las universidades españolas.
Reforzar el sistema universitario
Con esta Ley se pretende reforzar el sistema universitario en su conjunto, para que afronte los nuevos retos adecuando las perspectivas en financiación, en innovación y revalorización de la docencia, y ahondando en la transferencia de conocimiento hacia la sociedad.
«Las universidades son y tienen que seguir siendo el faro que proyecta al mundo los valores de Europa: valores democráticos, de derechos sociales, de igualdad y de reconocimiento de la diversidad, asegurando también su cada vez mayor aportación a las necesidades y retos sociales», afirmó el ministro Joan Subirats en su intervención en sede parlamentaria.
Sobre este tema, Subirats ofrecerá la conferencia inaugural del XIX Congreso de Investigadores en Economía Social de CIRIEC-España, el próximo 20 de abril en el Tecnocampus (Mataró, Barcelona).
En Andalucía
Las universidades andaluzas concentran actualmente el 8,9% de la formación universitaria de postgrado en España. Una cifra claramente por debajo, por ejemplo, del peso de las cooperativas andaluzas en la economía nacional, donde representan más del 20% de las empresas, del empleo y de la facturación.
Según un informe de CEPES, en el curso académico 2022-2023, las universidades españolas han ofrecido 76 acciones formativas de postgrado, 19 cátedras y 3 doctorados relacionados con la economía social, lo que supone un total de 98 acciones.