El Consejo de Gobierno ha aprobado una declaración institucional en la que manifiesta su apoyo al cooperativismo y a la Economía Social de Andalucía en general, un sector en el que Andalucía es líder en número de empresas y empleos, coincidiendo con el Día
Internacional del Cooperativismo, que cada año se celebra el primer sábado de julio.
La Economía Social aporta alrededor del 14% del PIB, el 20% de los puestos de trabajo existentes y está presente en todos los sectores económicos. En cuatro de cada cinco municipios andaluces hay al menos una empresa de Economía Social. El Gobierno
andaluz refleja en el texto su convencimiento de que la Economía Social debe ser un modelo empresarial catalizador de la transformación del futuro social y económico de Andalucía. Por todo ello, el Gobierno de la Junta de Andalucía explicita su apoyo a la Economía Social andaluza, a las personas y voluntades que la sustentan y, especialmente, a las cooperativas por la importancia que este sector tiene para Andalucía.
Texto íntegro de la Declaración Institucional de apoyo al cooperativismo andaluz:
El Día Internacional del Cooperativismo, que cada año se celebra el primer sábado de julio, es una ocasión excepcional para destacar el papel fundamental del cooperativismo y de la Economía Social en Andalucía. Las empresas cooperativas destacan por ser un
emprendimiento de impacto que actúa contra la precariedad en el empleo y facilita la inclusión laboral de diversos grupos y colectivos, con especial incidencia en las mujeres y en los jóvenes. Andalucía, acogedora e impulsora de este emprendimiento, es una comunidad puntera en número de empresas y empleos en este ámbito.
La Economía Social es uno de los pilares del modelo social europeo y destaca por su contribución al crecimiento inteligente, sostenible e inclusivo que promueve el empleo de alta calidad, potencia la cohesión social, impulsa la innovación social y favorece el
desarrollo local y regional y la protección del medio ambiente. Así lo proclamaron por unanimidad en 2015 los 28 estados miembros de la Unión Europa en las Conclusiones del Consejo de la Unión Europea sobre ‘La promoción de la Economía Social como
motor clave del desarrollo económico y social en Europa’ así como mediante la aprobación por la comisión Europea del Plan de Acción para la economía social “Construir una economía que trabaja para las personas”.
En pocos territorios de la Unión Europea estas palabras cobran tanto sentido como en Andalucía, la Comunidad Autónoma que más empresas de Economía Social crea y más empleo genera y en la que el cooperativismo es seña de identidad, gracias, entre otras
cuestiones, a contar con una de las leyes de cooperativas más avanzadas del ámbito internacional.
La Economía Social aporta alrededor del 14% del PIB, el 20% de los puestos de trabajo existentes y está presente en todos los sectores económicos. En cuatro de cada cinco municipios andaluces hay al menos una empresa de Economía Social.
Además de esos factores cuantitativos, es innegable su contribución al desarrollo armónico de Andalucía y a su vertebración territorial, atenuando la despoblación de las zonas rurales y conservando el medio ambiente en el que desarrollan su actividad. Las
empresas de Economía Social no se deslocalizan, permanecen donde nacen.
Asimismo, se distingue por la creación de empleo para colectivos que habitualmente muestran dificultades de acceso al mercado laboral, ya que la Economía Social no solo comprende a las cooperativas, sociedades laborales, mutualidades o cofradías de
pescadores, sino también a centros especiales de empleo, empresas de inserción y organizaciones de integración de personas en riesgo de exclusión.
Este papel esencial de la Economía Social se vio reforzado durante la reciente pandemia de Covid-19, dada la capacidad de resiliencia y adaptación de tales empresas, que en lo peor de la crisis sostuvieron el empleo 6,5 puntos por encima de la media y llegando en las cooperativas a los 10 puntos.
En diciembre de 2020, el Parlamento de Andalucía ya reconoció este papel fundamental de la Economía Social andaluza en una Proposición No de Ley.
Asumiendo todo lo anterior, y aplicándolo a su afán transformador frente a los nuevos desafíos, el Gobierno andaluz aprobará en breve el Plan de Impulso y Modernización de la Economía Social Andaluza, que implica a nueve consejerías y diez direcciones
generales, para lograr el apoyo pleno, coordinado e integral de la Administración andaluza a sus empresas de Economía Social.
Este Gobierno tiene el convencimiento de que la Economía Social debe ser un modelo empresarial catalizador de la transformación del futuro social y económico de Andalucía. Por todo ello, y aún más allá de este plan de impulso, quiere explicitar su apoyo a la
Economía Social andaluza, a las personas y voluntades que la sustentan y, especialmente, a las cooperativas por la importancia que este sector tiene para Andalucía.
En tiempos complejos como los actuales, el talento, la iniciativa y la determinación que tan propios son de este modelo se alían más que nunca a favor de los intereses de Andalucía, de su futuro y de sus aspiraciones de liderazgo.
Nuestras cooperativas y nuestras empresas de Economía Social hablan a España, al mundo y a nosotros mismos, los andaluces, de todo cuanto nuestra tierra tiene de excepcional y de hasta dónde somos capaces de llegar en nuestro compromiso con ella.
Y así lo reconocemos y lo proclamamos con ocasión de este Día Internacional del Cooperativismo.